¿Te gustan las chicas que te muestran su ropa interior aunque lo hagan con una cara de asco? Súper rico, un genio y bueno en todo tipo de deportes, un hombre que no tiene interés en el sexo opuesto de repente tiene la necesidad de ver ropa interior un día. La sirvienta de su hogar, una compañera de clases, la cajera de la librería... ¡él no se detendrá hasta haber visto su ropa interior!
